Después de inmensas discursiones con los amigos a cerca de la posibilidad de la existencia o la no existencia de un ser superior, supraterrenal o con la idea que vulgarmente tenemos de lo que llamamos Dios, he decidido poner esta entrada.
Acercar posturas o poner las piezas sobre la mesa y que cada uno piense lo que quiera, es lo que voy a intentar hacer, ahora la pieza la mueves tú.
Ateismo en su noción etimológica se refiere a la falta de creencia en la existencia de cualquier dios, que es la definición más aceptada en el ámbito filosófico. Sin embargo existen otras definiciones más o menos amplias del término, en su mayoría surgidas de la cultura popular.El término proviene del adjetivo griego αθεος (azeós), que significaba ‘sin dios’ (en cualquiera de los dos sentidos, de no creer en uno o más dioses o de no venerarlos debidamente); siendo a la partícula negativa ‘no’ o ‘sin’; y theós: ‘dios’ (literalmente Zeus).
Contrariamente a la creencia común y a algunos diccionarios antiguos, la gran mayoría de los ateos NO niega absolutamente la extremadamente pequeña posibilidad de Dios. Para negar a Dios categóricamente, un ateo tendría que saber todas las posibles definiciones de Dios, examinarlas todas, y encontrarlas a todas lógicamente auto contradictorias o falsas, y entonces rechazarlas todas. Hacer todo esto requeriría que el ateo fuera omnisciente. Además, los ateos se rehúsan a dar el “salto de fe” desde la evidencia hasta una conclusión que la evidencia no amerita. Los ateos dejan ese error lógico para los teístas. Como los ateos no pueden negar a dios lógicamente, no lo hacen. Cualquiera que diga que los ateos hacen una declaración global tan simplista sencillamente no está familiarizado con la literatura del ateísmo.
Los ateos siempre han adoptado la postura de la que se considera que la carga de la prueba hacerca de que si algo es lógicamente siempre descansa sobre los hombros de la persona que lo afirma como cierto.
ateísmo. m.

Opinión u doctrina del ateo.

ateo, a.

(Del lat. atheus, y este del gr. ateos.) adj. Que niega la existencia de Dios. Apl. a pers., ú. t. c. s.

negar.

(Del lat. negare.) tr. Decir que algo no existe (*), no es verdad (**) , o no es como otro cree o afirma (***). |2. Dejar de reconocer alguna cosa, no admitir su existencia. | 3. Decir que no a lo que se pretende o se pide, o no concederlo. | 4. Prohibir o vedar, impedir o estorbar. | 5. Olvidarse o retirarse de lo que antes se estimaba y se frecuentaba. | 6. No confesar uno el delito de que se le hace cargo. Se usa regularmente hablando de los reos preguntados jurídicamente acerca de este delito. | 7. Desdeñar, esquivar una cosa o no reconocerla como propia. | 8. Ocultar, disimular. | 9. prnl. Excusarse de hacer una cosa o repugnar el introducirse o mezclarse en ella. | 10. No admitir uno al que va a buscarlo a su casa, haciendo decir que está fuera. negarse uno a sí mismo.fr. No ceder a sus deseos y apetitos, sujetándose enteramente a la ley, y gobernándose, no por su juicio, sino por el dictamen ajeno conforme a la doctrina del Evangelio.
Nótese que la definición de ateísmo implica negación, y la definición de negar a su vez implica dos aspectos: la afirmación de no existencia, por un lado (*), y por el otro la falta de verdad de una afirmación o creencia (** y ***). Lo primero incluye al ateísmo fuerte (aquel que afirma lo contrario al teísmo, que no existe un dios), y lo segundo incluye el ateísmo débil (aquel que no cree en la existencia de uno o más dioses)
El diccionario de la RAE también nos da la definición de agnosticismo:
agnosticismo.
(De agnóstico.) m. Doctrina filosófica que declara inaccesible al entendimiento humano toda noción de lo absoluto, y reduce la ciencia al conocimiento de lo fenoménico y relativo.

El Ateísmo en la Red

Más sobre Huxley y la definición del agnosticismo

Huxley nos describe cómo llegó a inventar la palabra "agnóstico":
Cuando alcancé la madurez intelectual, y comencé a preguntarme si era un ateo, teísta o panteísta, materialista o idealista, cristiano o librepensador, me encontré con que mientras más aprendía y reflexionaba, menos cerca estaba la respuesta, hasta que llegué a la conclusión que no tenía arte ni parte en ninguna de estas denominaciones excepto la última. La única cosa en la cual esta buena gente estaba de acuerdo era en la que yo difería de ellos. Estaban bastante seguros de que habían alcanzado una cierta "gnosis", de que habían solucionado más o menos el problema de la existencia; mientras que yo estaba seguro de que no lo había hecho, y tenía una convicción bastante fuerte de que el problema era irresoluble. Y, con Hume y Kant de mi lado, no podía pensar de mí como presuntuoso por aferrarme a esa opinión. [...] Así que me puse a pensar, e inventé lo que concebí como el titulo apropiado de "agnóstico". Vino a mi mente como la sugestiva antítesis del "gnóstico" de la historia de la iglesia, que profesaba saber tanto de las cosas que yo ignoraba; y aproveché la primera oportunidad de hacerla desfilar en nuestra Sociedad, para demostrar que yo también tenía cola, como los otros zorros.
[Citado en "Encyclopaedia of Religion and Ethics", 1908, editada por James Hastings MA DD]
Huxley se quedó tan encantado de averiguar que la palabra "agnóstico" tomó arraigo, que procedió a expandir lo que quería decir con ella.
El agnosticismo, de hecho, no es un credo sino un método, la esencia de lo que se basa en la rigurosa aplicación de un solo principio. Ese principio es muy antiguo, es viejo como Sócrates, viejo como el escritor que dijo "Pruébalo todo, aférrate de lo bueno"; es el cimiento de la Reforma, que ilustró con simplicidad el axioma que todo hombre debería ser capaz de dar razón de la fé en él, es el gran principio de Descartes; es el axioma fundamental de la ciencia moderna. Positivamente, el principio puede ser expresado así: En cuestiones del intelecto, siga a su razón tan lejos como le lleve, sin prestar atención a otras consideraciones. Y negativamente: En cuestiones del intelecto, no suponga ciertas las conclusiones que no han sido demostradas o no son demostrables. Tomo eso como la fe agnóstica, que si un hombre la respeta entera e incorruptamente, no deberá tener vergüenza de mirar en los ojos al universo, cualquiera sea el futuro que éste le guarde. Los resultados de la definición del principio agnóstico variarán de acuerdo al conocimiento individual y la capacidad, y de acuerdo a la condición general de la ciencia. Lo que no ha sido probado hasta hoy puede ser probado, con la ayuda de nuevos descubrimientos, mañana. Los únicos asuntos negativos inmutables serán aquellas negaciones que fluyen de la demostrable limitación de nuestras facultades. Y la única obligación aceptada es la de tener la mente siempre abierta a la convicción.
["Agnosticism", 1889]
Es erróneo que una persona diga que está seguro de la verdad objetiva de una proposición a menos que pueda dar evidencia que justifique lógicamente esa certeza. Esto es lo que el agnosticismo asevera, y en mi opinión, todo lo que es esencial para el agnosticismo.. ¿Qué es el laicismo?
  • B. El laicismo y la religión.
  • A. ¿QUÉ ES EL LAICISMO? 1. ¿Qué es el laicismo? El laicismo es una teoría religioso-política que persigue eliminar a Dios de la sociedad, estableciendo un sistema ético ajeno a Dios. En su aspecto religioso es un ateísmo práctico que se impone a la sociedad con medidas políticas. 2. ¿Ateos o indiferentes? El laicismo adopta la postura de una indiferencia teórica. Pero en la práctica exige actuar como si Dios no existiera. También puede decirse que el laicismo es un ateísmo social porque pretende organizar una sociedad sin Dios (ateo significa sin Dios). 3. ¿En qué se basa el laicismo? Para instaurar sus planteamientos, el laicismo se basa en dos ideas correctas pero mal entendidas: la separación Iglesia-Estado y la libertad religiosa. 4. ¿Es buena la libertad religiosa? Sí; cada uno debe tener libertad para ejercitar la religión que desee, dentro de los límites del bien común. No se debe imponer una religión (ni un ateísmo). 5. ¿Es bueno separar religión y política? Depende cómo se interprete esto. Sobre todo depende qué se entienda por religión.
    • Si con esa separación se expresa que los curas no sean políticos, y los gobernantes no sean obispos, entonces la frase es correcta. Cada uno gobierne en su terreno.
    • Si con esas palabras se afirma que una religión no debe exigirse a todos, sino que se deben respetar las conciencias, entonces la separación es acertada. (Por esto el laicismo no debe imponerse a todos).
    • Si por religión se entiende a Dios, los actos de culto o las enseñanzas espirituales, entonces no es bueno separar la sociedad de Dios.
    • Si con esta separación se expresa enfrentamiento, tampoco es conveniente pues lo ideal es que Iglesias y Estados trabajen cada uno en su ámbito ayudándose en conseguir el bien de los ciudadanos.
    6. ¿Y la laicidad del Estado? (Preguntan desde Chile). La laicidad del Estado es distinta del laicismo. La laicidad propone que el Estado no debe estar ligado a una religión particular sino que debe respetar la libertad religiosa. Sostiene que debe haber una separación adecuada entre Iglesia y Estado y no perjudicar a los ciudadanos por motivos religiosos. Es correcto. En cambio en el laicismo, el Estado impulsa el ateísmo optando por la religión atea. B. EL LAICISMO Y LA RELIGIÓN 1. ¿Qué defiende el laicismo ante la religión? El laicismo desea instaurar varios planteamientos:
    • Para el laicismo, el Estado debe apoyarse en una base común sin Dios. El laicismo reclama un Estado confesionalmente ateo.
      - Sin embargo, el ateísmo es una postura religiosa que tampoco debe imponerse.
    • El laicismo intenta relegar la religión al ámbito privado, prohibiendo las manifestaciones públicas de fe.
      - Sin embargo, una persona coherente vive de acuerdo con sus creencias tanto en privado como en la vida social. No se debe obligar al creyente a que se comporte como un ateo. (Tampoco se debe forzar al ateo a que actúe como religioso).
    • El laicismo y el relativismo suelen ir unidos, pues ambos defienden el indiferentismo religioso. - Hay varias religiones pero esto no significa que sean falsas, o que sea indiferente elegir una. Por ejemplo, puede haber varias teorías sobre un hecho histórico, pero sólo un suceso tuvo lugar realmente. Habrá que buscar la religión verdadera.
    2. ¿Ejemplos de actitudes laicistas?
    • El laicismo suprimirá las clases de religión, las fiestas e imágenes religiosas, asentando su ateísmo con excusa de respeto a otras religiones.
      - Respetarlas sería añadir imágenes y clases de las religiones que lo soliciten razonablemente. Quitar todas es imponer la religión atea.
    • Especialmente, el laicismo rechaza cualquier idea que suene a católica.
      - Sin embargo, el que una idea sea católica no la hace falsa. Por ejemplo, la razonable idea de prohibir el robo.
    3. ¿Hay un marco de gobierno común? El laicismo intenta que la base ética del Estado sea el ateísmo, pero esto es una postura que tampoco debe ser obligatoria. Entonces, ¿qué es lo común a todos los hombres? Precisamente el hecho de ser hombres. Por esto, las reglas éticas del Estado deberán basarse en lo propio de la naturaleza humana, en la llamada ley natural. (El ateísmo es la menos natural de las posturas religiosas). Con otras palabras: la base está en la dignidad de la persona humana. 4. ¿Se conocen las normas de la ley natural? El documento más conocido que contiene un resumen de la ley natural son los diez mandamientos. En su origen son formulaciones judeo-cristianas, pero ya se han convertido en patrimonio de la humanidad. 5. ¿Hay mandamientos laicistas? El laicismo no tiene reglas morales ni mandamientos, salvo apartar a Dios sobre todas las cosas. - Al quitar a Dios es difícil mantener unas reglas de conducta. Puedes matar y robar mientras no te pillen. Usa del sexo como te dé la gana. Miente lo que te convenga. Por esto, en las sociedades donde el laicismo se extiende, aumentan la delincuencia y la corrupción. 6. ¿No hay ateos buenos? Hablamos del laicismo en general. En cambio, hay casos particulares de personas ateas que se comportan bastante bien -excepto con Dios, lógicamente-.
    El debate sobre la relación entre el laicismo y la sociedad democrática actual (en España y en Europa) viene ya siendo vivo en los últimos tiempos y probablemente cobrará nuevo vigor en los que se avecinan: dentro de nuestro país, por las decisiones políticas en varios campos de litigio que previsiblemente adoptará el próximo Gobierno; y en toda Europa, a causa de los acuerdos que exige la futura Constitución europea y por la amenaza de un terrorismo vinculado ideológicamente a determinada confesión religiosa. En cuestiones como ésta, en que la ceguera pasional lleva a muchos a tomar por enemistad diabólica con Dios el veto a ciertos sacristanes y demasiados inquisidores, conviene intentar clarificar los argumentos para dar precisión a lo que se plantea. A ello y nada más quisieran contribuir las cinco tesis siguientes, que no pretenden inaugurar mediterráneos, sino sólo ayudar a no meternos en los peores charcos.
    1. Durante siglos, ha sido la tradición religiosa -institucionalizada en la iglesia oficial- la encargada de vertebrar moralmente las sociedades. Pero las democracias modernas basan sus acuerdos axiológicos en leyes y discursos legitimadores no directamente confesionales, es decir, discutibles y revocables, de aceptación en último caso voluntaria y humanamente acordada. Este marco institucional secular no excluye ni mucho menos persigue las creencias religiosas: al contrario, las protege a las unas frente a las otras. Porque la mayoría de las persecuciones religiosas han sucedido históricamente a causa de la enemistad intolerante de unas religiones contra las demás o contra los herejes. En la sociedad laica, cada iglesia debe tratar a las demás como ella misma quiere ser tratada... y no como piensa que las otras se merecen. Convertidos los dogmas en creencias particulares de los ciudadanos, pierden su obligatoriedad general pero ganan en cambio las garantías protectoras que brinda la Constitución democrática, igual para todos.
    2. En la sociedad laica tienen acogida las creencias religiosas en cuanto derecho de quienes las asumen, pero no como deber que pueda imponerse a nadie. De modo que es necesaria una disposición secularizada y tolerante de la religión, incompatible con la visión integrista que tiende a convertir los dogmas propios en obligaciones sociales para otros o para todos. Lo mismo resulta válido para las demás formas de cultura comunitaria, aunque no sean estrictamente religiosas, tal como dice Tzvetan Todorov: "Pertenecer a una comunidad es, ciertamente, un derecho del individuo pero en modo alguno un deber; las comunidades son bienvenidas en el seno de la democracia, pero sólo a condición de que no engendren desigualdades e intolerancia" (Memoria del mal).
    3. Las religiones pueden decretar para orientar a sus creyentes qué conductas son pecado, pero no están facultadas para establecer qué debe o no ser considerado legalmente delito. Y a la inversa: una conducta tipificada como delito por las leyes vigentes en la sociedad laica no puede ser justificada, ensalzada o promovida por argumentos religiosos de ningún tipo ni es atenuante para el delincuente la fe (buena o mala) que declara. De modo que si alguien apalea a su mujer para que le obedezca o apedrea al sodomita (lo mismo que si recomienda públicamente hacer tales cosas), da igual que los textos sagrados que invoca a fin de legitimar su conducta sean auténticos o apócrifos, estén bien o mal interpretados, etcétera...: en cualquier caso debe ser penalmente castigado. La legalidad establecida en la sociedad laica marca los límites socialmente aceptables dentro de los que debemos movernos todos los ciudadanos, sean cuales fueren nuestras creencias o nuestras incredulidades. Son las religiones quienes tienen que acomodarse a las leyes, nunca al revés.

      Escepticismo


      Definición
      "El escepticismo es la facultad de oponer, de todas las maneras posibles los fenómenos posibles y los noúmenos; y de ahí llegamos, por el equilibrio de las cosas y de las razones opuestas (isostenia), primero a la suspensión del juicio (epojé) y después a la indiferencias (ataraxia)."
      El escepticismo toma una actitud contraria al dogmatismo. Esta corriente tiene una posición que el sujeto no puede aprehender al objeto.
      "El sujeto cognoscente depende de una serie de factores que le impiden llegar al objeto."
      Para comprender el escepticismo es necesario saber que: "El escepticismo como doctrina filosófica tiene dos aspectos: Uno teórico y otro práctico.
      Desde el punto de vista teórico, el escepticismo es una doctrina del conocimiento según la cual no hay ningún saber firme, ni puede encontrarse nunca ninguna opinión absolutamente segura. Desde el punto de vista práctico, el escepticismo es una actitud que encuentra en la negativa a adherirse a ninguna opinión determinada en la suspensión del juicio (epojé), la salvación del individuo, la paz interior."
      El escepticismo no pone en duda el fenómeno, sino lo que se dice de él, y esto es diferente del fenómeno mismo.
      Origen del escepticismo
      El escepticismo empezó propiamente en el siglo III a.C. con Pirrón de Elis y los pirronáicos que fueron llamados escépticos. Pirrón fue influido durante su expedición militar por la silenciosa sabiduría de los orientales.
      Sentido y fases del escepticismo griego
      El escepticismo griego tiene cuatro etapas bien definidas, aunque propiamente no guardan relación entre sí:
      1. El escepticismo, en cuanto actitud negativa ante la validez del conocimiento científico aparece con Pirrón. Su actitud y sentido es moral, al estilo de las escuelas socráticas menores en cuyo marco se encuadra el pensamiento.
      2. La segunda fase del escepticismo se desarrolla en la Academia Platónica en lucha contra el dogmatismo de los estoicos.
      3. El escepticismo reaparece en forma más aguda a finales del siglo I a.C, con Enesidemo y Agripa.
      4. La última fase del escepticismo es representada por Sexto Empírico, médico que perteneció a la escuela empírica del siglo II d.C., quien se proponía destruir toda clase de dogmatismo especulativo, adoptando una actitud práctica empirista ante la realidad.
      Representantes del escepticismo antiguo
      Pirrón
      Pirrón nació en Elis, en Peloponeso, en el 360 a.C. y murió en el 270 a.C. Estuvo primariamente en relación con Brisón de Heráclea. Anaxarco de Abdera lo inició en el atomismo, al que daba un sentido práctico, como medio para hallar la felicidad. Acompañó a Alejandro en su expedición a la India; se distinguió por su sencillez y austeridad. No escribió nada.
      Hacia el año 330 a. C., "años antes de la fundación del Liceo, abrió escuela en Elis, fue muy estimado por sus conciudadanos que lo hicieron gran sacerdote de la ciudad."
      Pensamiento. "Enseñó que la razón humana no puede penetrar hasta la esencia íntima de las cosas. Lo único que podemos conocer es la manera como las cosas aparecen ante nosotros." Por lo tanto, de nada podemos estar ciertos, y el sabio debe abstenerse de juzgar.
      No podemos fiarnos ni de las percepciones sensibles ni de la razón. No se debe admitir alguna afirmación teórica. Guardando estos principios se consigue la tranquilidad del alma (ataraxia).
      La preocupación de Pirrón no era la del mundo físico, era la virtud y la felicidad, como también la crítica dialéctica de las opiniones contrarias.
      La doctrina de Pirrón se puede reducir a lo siguiente: "No hay nada bueno sino la virtud, ni malo, sino el vicio. La felicidad consiste en la paz y la tranquilidad del alma, todo lo demás es indiferente."
      Carnéades
      Nació en Cirene en el 214 a.C. y murió en el 137 a.C. Discípulo de Hegésinos y del estoico Diógenes de Babilonia. Fue un orador vigoroso, dialéctico crítico implacable del dogmatismo de los estoicos, carismático. En un discurso a favor de la justicia causó gran impresión sobre la juventud, hasta el punto que Catón el viejo rogó al Senado que lo expulsara. Es el fundador de la tercera academia escéptica.
      Pensamiento. "Seguidor de Arcesilao, Carnéades enseñó que el conocimiento es imposible y que no existe criterio alguno de verdad."
      Carnéades trató de excluir toda noción absoluta, apoyándose nada más que al aspecto crítico y negativo, al relativismo, al probabilismo y a la verosimilitud.
      "No hay ninguna doctrina que sea verdadera y cierta en sí misma. Todas tienen solamente parte de verdad, y esa parte es suficiente, para fundamentar la acción ateniéndose a la probabilidad."
      Carnéades comprendió que la suspensión total del juicio es imposible y elaboró la teoría de la probabilidad que abarca diversos grados y , es a la vez, necesaria y suficiente para la acción.
      La influencia de Carnéades va hasta el siglo I d.C., expresada en particular en la mentalidad de Marco Tulio Cicerón.
      Sexto Empírico
      Nació en Grecia en el año 200 d. C., vivió en Alejandría y Roma. Es uno de los principales representantes del escepticismo antiguo, considerado como neopirrónico y seguidor de Enesídemo. Además fue médico.
      Se conocen las opiniones de los escépticos por medio de resúmenes, explicaciones argumentadas por Sexto en sus obras, las cuales constituyen una de las fuentes capitales para el conocimiento antiguo. "Algunos historiadores consideran a Sexto como un compilador poco sitemático."
      Sus obras conservadas son "Los bosquejos pirrónicos", en tres libros; también se conocen: La obra contra los dogmáticos, La obra contra los profesores (matemáticas).
      Pensamiento. Es con Sexto Empírico que se da la última etapa del escepticismo antiguo en la forma de empirismo que desarrolla la lógica fenomenológica. "Así nace una ciencia positivista, ni Hume ni Comte han inventado nada realmente".
      Sexto sostiene que debemos suspender el juicio porque tanto la afirmación como la negación son igualmente persuasivas. No hay criterio de verdad, las demostraciones son relativas, la causa es incapaz de explicar los hechos. La única actitud racional es la abstención de todo juicio, sólo así se logra la libertad del espíritu, pues no se sujeta a ninguna escuela o dogma. Pretendía Sexto que el escéptico debiera ser ante todo un observador, un buscador y cuestionador que no niega ni afirma nada, teniendo en cuenta que el escéptico no pretende negar la realidad, pero sí los juicios sobre la realidad.
      Los argumentos más conocidos de Sexto se encuentran en los llamados "tropos", en el octavo tropo Sexto dice: "Todas las cosas son relativas, nos vemos obligados a sus pender nuestro juicio sobre lo que son absolutamente y por naturaleza."
      Sexto está tan seguro de que todo es relativo, que al respecto expresa con fuerza: "Aquél que niega que todo es relativo, confirma que todo es relativo, ya que muestra que la proposición misma "todo es relativo" es relativa a nosotros, que no es absoluta, por que él nos contradice."
      En los tropos también se encuentran los argumentos contra el silogismo, contra la noción de causa y contra la idea de providencia. En los argumentos contra el silogismo declara que la conclusión silogística representa un círculo vicioso. En los argumentos contra la noción de causa afirma que si la causa es una relación, no puede existir objetivamente. En cuanto a la providencia Sexto destacaba las antinomias cosmológicas (como la posibilidad de ser Dios finito o infinito) y las antinomias morales (Como la contradicción entre la perfección divina y la existencia del mal).
      Finalmente dice Sexto: "Los tropos liberan al espíritu como un purgante libera al intestino evacuándose a sí mismo. La conclusión no es pues "yo no se nada", sino mas bien "yo me abstengo (de juzgar), examino, busco", o, mejor aún "qué es lo que se ?, fórmula de la que hizo su divisa Montaigne."
      El esceoticismo moderno
      Los rasgos concretos de esta nueva época cobran plenitud y nitidez en la contra imagen negativa del escepticismo. "Si se quiere llegar a comprender el escepticismo como un factor necesario del pensamiento, no se debe perder de vista esta significación y este rendimiento indirecto."
      Las proposiciones escépticas, aunque por su contenido se remonten a las fórmulas antiguas, aparecen bajo un signo opuesto. La filosofía griega vuelve a ser maestra; pero lo es ahora en un sentido nuevo: "La época moderna se vuelve, no a sus soluciones más maduras y más altas, sino a los últimos problemas y a las últimas dudas a que llega y con que concluye, para asimilárselas interiormente y crear con ello, la condición fundamental para su propia solución futura."
      Lo que en la antigüedad aparece como resultado final de una desintegración práctica, en esta etapa moderna se presenta como un punto de partida.
      Representantes
      Miguel de Montaigne
      Nació en 1533, de origen francés, y murió en 1592 en su patria natal. De noble familia, estudió leyes, con lo cual se convirtió en consejero del Tribunal de Impuestos de Périgueux. Después, en 1557, ocupó el cargo de consejero en el parlamento de Burdeos. En 1570 abandonó sus cargos para retirarse a sus tierras, donde se dedicó a la meditación.
      Obras. "En sus famosos ensayos es un fruto óptimo de su época, de su patria, del Renacimiento Francés, al que propulsa y da feliz sentido identificándolo con el más auténtico de la antigüedad clásica."
      Su primera obra fue llamada "Ensayos" editada en 1580, en la que revela su personalidad. Publica también un ensayo llamado "De la instrucción de los niños", asunto que tanto preocupó a Montaigne. También se conoce un diario llamado "Diario de viaje" (1580-1581). Es el creador del ensayo.
      Pensamiento. Montaigne dibuja un perfil externo y trata la ordenación formal de su doctrina en el capítulo II del libro de ensayos, titulado "Apología de Raimoud de Sabonde. En este capítulo se notan rasgos del pensamiento de la Edad Media.
      Para el autor de los ensayos, el gran problema del hombre se sitúa en el plano de la existencia, es por eso que:
      "La fuerza y la originalidad del escepticismo de Montaigne se manifiestan en el hecho de que sabe forjar los resultados positivos y los títulos de legitimidad de la nueva investigación, dialécticamente, en otras tantas armas contra el valor y el criterio de la validez general del saber humano."
      Montaigne ve la idea de la infinitud de los mundos para aislar al individuo y conferir un valor simplemente relativo a la vigencia de sus leyes del conocimiento.
      Establecer la armonía entre el pensar y el ser, conocer el espíritu humano como imagen y símbolo de la realidad absoluta, éste es el problema central que aborda la filosofía moderna.
      El pensar y el ser no pueden llegar a una verdadera consonancia, mientras pertenezcan a diferentes dimensiones lógicas, mientras el ser absoluto preceda el pensamiento como un concepto general y superior y lo englobe como un caso especial.
      "El mérito lógico indirecto del escepticismo es haber desarrollado esta concepción hasta darle completa claridad."
      Para Montaigne, el saber no nos comunica la forma y naturaleza de las cosas, sino solamente la peculiaridad del órgano sobre el que las cosas actúan.
      En Montaigne el escepticismo desde un primer momento, al igual que el de la antigüedad, contiene un criterio ético positivo, su meta final es la ataraxia. Se entiende que: "El escepticismo precave al individuo contra el imperio de las pautas morales impuestas desde fuera y, enfrentándose a todas las convenciones morales arbitrarias, le asegura la libertad discursiva de su juicio."
      El escepticismo montaigniano se eleva a la auténtica significación del no saber socrático.
      "La duda no se hunde en el vacío, sino que encuentra siempre su punto fijo de apoyo y de anclaje en el suelo de la consideración de los valores."
      Mientras el individuo sepa captarse en sí mismo y en toda su pureza, y sobre poniéndose a todas las limitaciones impuestas por la sociedad, descubre en sí la forma fundamental del espíritu de la humanidad en general, pues es en el hombre mismo donde se halla la esencia y la verdad.
      El problema de la muerte ocupa el centro de las consideraciones éticas de los Ensayos de Montaigne: "Filosofar es aprender a morir", nos dice. "La muerte es condición esencial de tu creación, parte de ti mismo: huyes de ti mismo cuando la huyes." La vida para Montaigne, de por sí, no es ni un bien ni un mal, es la morada del bien o del mal, según lo que tú hagas de ella.
      La duda de Montaigne, expresa al mismo tiempo el presentimiento de los nuevos problemas del conocer, él no llega a abordar de un modo positivo ningunos de los problemas que ahora surgen, pero "con él se liberan por vez primera y emprenden su vuelo las fuerzas fundamentales del espíritu que ayudarán a modelar el porvenir."
      David Hume
      Nació en Edimburgo en 1711 y murió el 25 de agosto de 1776. De familia perteneciente a la pequeña nobleza escocesa. Tuvo amistad con Adam Smith; frecuentó a los Enciclopedistas y discrepó con Rousseau. Se unió a la corriente anticartesiana iniciada por Locke.
      Obras. Tratado sobre la naturaleza humana (1739), Ensayos morales y políticos (1742). Su obra está dividida entre una teoría empirista del entendimiento y una teoría utilitarista de la vida social.
      Pensamiento. El espíritu analítico le llevó al escepticismo, como dice él: "La estéril roca en el que se ve reducido a casi la desesperación de reconocer la imposibilidad de enmendar o corregir [...] la desventurada condición, debilidad y desorden de las facultades."
      Para Hume "un verdadero escéptico desconfiará de sus dudas filosóficas" lo mismo que de sus convicciones filosóficas. La duda escéptica surge naturalmente de una reflexión profunda e intensa sobre la cuestión de los hábitos de pensamiento.
      "Quien profese un escepticismo estricto, habrá de enfrentarse, no sólo alembarazo de tener que violar sus principios teóricos para atender a las exigencias prácticas, sino también a la compulsión natural a romper con el intolerable talante de la melancolía y delirio filosófico que toma posesión del escéptico tras un ataque de concepciones metafísicas".
      Hume, en más de una ocasión llegó a la existencia del genuino escéptico, y al respecto nos dice: "Que el único resultado del escepticismo es un asombro momentáneo, irresolución y confesión."
      Si somos filósofos debemos permanecer sólo sobre principios escépticos. "Toda realidad no es más que un puro fenómeno o hecho de conciencia, no hay sustancia ni material ni espiritual, la sustancia no es más que un concepto complejo basado en la relación de la identidad y de permanencia en el tiempo"; esto lo llevó a profesar un fenomenismo escéptico.
      Pedro Bayle
      Nació en Carlat (Francia) en 1647, y murió en 1706. Estudió filosofía en el colegio de los jesuitas de Puylaurens de 1666 hasta 1669. Se entregó a la lectura de Montaigne desde los veinte años, adoptando su actitud escéptica.
      Combatió siempre la intolerancia en materia de religión, consideraba inútiles las disputas teológicas.
      Obras. Es el autor de la primera enciclopedia, titulada Diccionario histórico y crítico, en el cual establecía una oposición absoluta entre la fe y la razón.
      Pensamiento. La táctica de Bayle consiste en plantear problemas por todas partes, sin manifestar nunca su propio pensamiento. Acumula antinomias enfrentando la ciencia a la fe. Su arma favorita es la historia.
      Fue un escéptico puro y simple que manifestó en todo momento una cautela. Lo que el propio Bayle escribió en el "Prefacio" de la primera edición del Diccionario, parece confirmar esta opinión. Lo que pretendió fue poner de relieve la contradicción entre razón y fe y la esterilidad de las controversias teológicas de su tiempo
      "En vez de discutir, hay que ser tolerante con todas las opiniones, pasando de la contradicción a la duda, de la duda a la indiferencia y de la indiferencia a la tolerancia".
      Voltaire ha dicho que en ninguna línea de Bayle hay un ataque directo al cristianismo, pero tampoco hay una sola línea que no mueva al escepticismo y a la irreligión.
      Bayle no niega pues todo esto y se limita a señalar que en todas las cosas se encuentran razones para dudar y que nuestra razón no es capaz de descubrir por sí misma la verdad.
      Actualidad del pensamiento
      Angustia y fanatismo son dos de las dolencias capitales de nuestro tiempo, como lo fueron, en distintas formas, del final del mundo antiguo. El intento de ir más allá fue la ataraxia, en la versión negativa, la suspensión o la abstención, el desinterés, la indiferencia no adoptando las formas positivas que son propias de una auténtica ataraxia, las cuales son el estado de alerta y el activo tenso sosiego.
      Para Ortega y Gasset, el escepticismo filosófico no debe ser una melancolía, ni un dolor indefinible, ni una inquietud difusa que vagabundea por nuestro pecho: " El escepticismo justificado como objeción a toda teoría, es una teoría suicida."
      Ya que el escéptico se niega a seguir filosofando, son muy poco los escépticos verdaderos y consecuentes en la historia de la filosofía. Si fuese necesario dar una definición que conviniese a todas las formas de escepticismo que presenta la historia del pensamiento filosófico, sería ésta: "El movimiento de disolución de un dogmatismo." Esa es la función que ejerció el antiguo, el moderno y el actual escepticismo.
       
    El Librepensamiento, es la mas elevada de las manifestaciones del ser humano porque es la facultad que posee cada individuo de utilizar con entera libertad la razón, para conocer la esencia de todo lo que existe y ocurre, en la realidad. El libre pensamiento “auténtico” es aquel que ha sido provocado por motivos constantes y esenciales; por aquello que al individuo le resulta significativo e indispensable Aquel que le permite, llegar a conclusiones no contradictorias después de recorrer el proceso cognoscitivo, en forma responsable y metódica, sin apartarse del orden lógico planeado, utilizando todos los mecanismos de la razón y leyes que conoce. Un librepensamiento “natural y puro” es solo aquel que le permite al individuo alcanzar por si mismo en forma independiente, sin atenerse o apoyarse en suposiciones, teorías y métodos ajenos o impuestos, un propósito liberador. De modo que cualquier pensamiento que este basado en la ignorancia, no es un pensamiento libre, como tampoco lo es el que este encaminado a suprimir o restringir las libertades de cualquier otro hombre, y nunca lo será el de aquel que se alquila para pensar y luego decir lo que conviene al que paga, aunque lo enmascare con un lenguaje bien estructurado Nunca será libre ni tan sabio ni tan transparente como el del hombre sencillo que trabaja y vive para el bien El librepensamiento es además por naturaleza un pensamiento amplio porque abarca un extenso círculo de cuestiones teóricas y prácticas, considera los problemas desde distintos puntos y utiliza toda la imaginación parar crear algo nuevo. Es también un pensamiento profundo porque penetra en la esencia de los problemas, llega al fundamento de los hechos, revela el sentido de lo que pasa, expone las leyes y las causas próximas y lejanas de los fenómenos así como la variedad de relaciones y conexiones que hay entre ellos y prevé sus consecuencias últimas. Es así mismo un pensamiento crítico porque valora con exactitud, las propias conclusiones, sus puntos débiles y fuertes, descubre sus valores y equivocaciones y frena las fantasías cuando estas comienzan a llevarlo por un camino falso hacia planes irreales y proyectos irrealizables. Y es también un pensamiento flexible porque rectifica y cambia los medios utilizados que permiten abordar el asunto desde nuevos puntos de vista cuando las soluciones resultan equivocadas Los diversos grados con que esas propiedades acompañan a la “libertad” en el pensamiento de cada individuo, dependen en gran medida, de su capacidad de razonar, pero también de su desarrollo cultural, de los conocimientos que posea sobre las leyes de la naturaleza y de la sociedad así como de su ideología, intereses y necesidades, y también del medio y del momento histórico que le ha tocado vivir Como fenómeno individual El Librepensamiento es, también una tendencia a la satisfacción plena de sus propósitos de liberación .personal y al disfrute de una vida superior de paz espiritual, a la realización de los más elevados y permanentes ideales, virtudes principios objetivos, valores, verdades y convicciones por los cuales vivir El ejercicio constante de dicha tendencia, es una experiencia autentica, natural y genuinamente espiritual que le da estilo, afirmación, forma y sentido a la persona. El librepensamiento aparece como FENÓMENO SOCIAL cuando dicha tendencia se generaliza y se convierte en un movimiento social que se concreta en una doctrina y se traduce en las ideas luminosas que son expresadas por sus líderes. El Librepensamiento, como movimiento social ha pasado a la historia como el motor impulsor de la vasta creación cultural, de las mejores enseñanzas, tradiciones y revoluciones, en todas las ciencias y artes que han conmovido y transformado a la sociedad y que ejemplarmente se hicieron visibles en las mas refulgentes y eclosivas épocas de la historia de la humanidad, como el Renacimiento, y la Ilustración. El librepensamiento fue el motor que impulso a todos los grandes hombres, a los sabios, héroes, mártires, apóstoles, líderes y libertadores de pueblos y benefactores de la humanidad, que vivieron en diferentes latitudes y nos dejaron a través de diferentes medios y en diferentes idiomas; el testimonio de sus reflexiones profundas, inventos, descubrimientos producciones, martirios y luchas. El Libre pensamiento como fenómeno social a pesar de los cambios ocurridos a través de los siglos en la sociedad humana, ha permanecido constante en la búsqueda de valores permanentes, que son rasgo este inseparable de la vida humana- Siempre se ha mantenido en permanente desarrollo, perfección y adaptación a las condiciones renovadas, sin cesar, de la sociedad, a los avances científicos y a los cambios sociales de cada época NECESIDAD ACTUAL DE UN PENSAMIENTO LIBRE Especialmente en el último siglo, con la aplicación del método científico a la naturaleza y a la vida, los seres humanos provocaron dramáticos cambios científicos, tecnológicos, sociales y políticos, al tiempo que abrieron la puerta al deterioro ecológico, a la superpoblación, al agotamiento de los recursos energéticos del planeta y a otros muchos males que continúan amenazando con provocar catástrofes de incalculables proporciones e incluso el exterminio de la especie humana Para sobrevivir a la situación así creada, el hombre actual, necesita de un mas hondo aprecio de la fraternidad y de la mas amplia comprensión de las Leyes de la Naturaleza, pero también del empleo a fondo de un VERDADERO PENSAMIENTO LIBRE que como una fuerza sintetizadora y dinámica, le permita corregir los desatinos así como prever metas sociales y satisfacciones personales adecuadas El FUTURO DEL LIBREPENSAMIENTO En el futuro el Librepensamiento, seguirá ajeno a los credos dogmáticos, a las personalidades heroicas y a todo lo que pudiera alimentar las discrepancias que por siglos han dividido y han enfrentado a los hombres y permanecerá activo, en constante desarrollo, ensanchándose, acrisolándose, engrandeciéndose, perfeccionándose interrumpidamente. Transformándose y adaptándose a los avances científicos y moldeándose a los cambios sociales y a las necesidades de cada época para dejar de ser una doctrina y convertirse en un himno a la vida REFERENCIAS SOBRE LIBREPENSAMIENTO “No bien se nace, ya están junto a la cuna con grandes y fuertes vendas preparadas en las manos, las filosofías, las religiones, las pasiones de los padres, los sistemas políticos y lo atan y lo enfajan y el hombre es ya para toda la vida un caballo embridado “José Marti “Sea libre el espíritu del hombre y ponga el oído directamente sobre la tierra… Y las dudas que su estudio le traiga, bien traídas los están pues que son naturales y saludables son, pues que de todas ellas, como un vapor de verdad, como una inmensa flor de luz, surge esplendorosa la fe en la armonía, bondad y eternidad del universo” José Marti

    ¿Qué es el Humanismo Secular?

    Por Fritz Stevens, Edward Tabas, Tom Hill, Mary Ellen Sikes y Tom Flynn. Traducción por Ferney Yesyd Rodríguez
    El Humanismo Secular es un término que ha sido usado en los últimos treinta años para describir una visión del mundo con los siguientes elementos y principios:
    • Una convicción de que los dogmas, ideologías y tradiciones religiosas, sociales o políticas, deben ser avalados y probados por cada persona de manera individual en lugar de ser aceptados simplemente por cuestión de fe.
    • El compromiso con el uso de la razón crítica, la evidencia factual y el método científico, en lugar de la fe y el misticismo, en la búsqueda de soluciones para los problemas de los humanos y las respuestas para las cuestiones humanas más importantes.
    • Una preocupación primaria con la satisfacción, el desarrollo y la creatividad tanto para el individuo como para la humanidad en general.
    • Una búsqueda constante por la verdad objetiva, teniendo entendido que nuestra imperfecta percepción de esa verdad es constantemente alterada por nuevos conocimientos y experiencias. (N. del T. En realidad los Humanistas Seculares reconocen que "conocer la verdad objetiva" es en si utópico. Sin embargo, es posible realizar una considerable aproximación al conocimiento objetivo, aunque sabemos que éste nunca podrá ser plenamente alcanzado.)
    • Una preocupación con esta vida y un compromiso de dotarla de sentido a través de un mejor conocimiento de nosotros mismos, nuestra historia, nuestras conquistas intelectuales y artísticas, y las perspectivas de aquellas que difieren de nosotros.
    • Una búsqueda de principios viables de conducta ética (tanto individuales, como sociales y políticos), juzgándolos por su capacidad de mejorar el bienestar humano y la responsabilidad individual.
    • Una convicción de que con la razón, un mercado abierto de ideas, buena voluntad y tolerancia, se puede obtener el progreso en la construcción de un mundo mejor para nosotros y nuestros hijos.

    ¿CÓMO VEN LOS HUMANISTAS SECULARES LOS ALEGATOS RELIGIOSOS Y SOBRENATURALES?

    Los humanistas seculares siguen una perspectiva o filosofía llamada Naturalismo, en la cual las leyes físicas del universo no están subordinadas a entidades inmateriales o sobrenaturales como demonios, dioses u otros seres "sobrenaturales" fuera del dominio del universo natural. Los eventos sobrenaturales como los milagros (que contradicen las leyes físicas) y los fenómenos psíquicos, como la percepción extrasensorial, la telekinesia, etc., no son descartados automáticamente, mas son vistos con un alto grado de escepticismo. (N. del T. Los Humanistas Seculares consideramos que quienes hacen afirmaciones extraordinarias deben mostrar evidencias extraordinarias. Son quienes afirman la existencia de algo los que deben mostrar claras y contundentes evidencias.)

    ¿LOS HUMANISTAS SECULARES SON ATEOS (O ATEÍSTAS)?

    Los Humanistas Seculares típicamente se describen como ateístas (sin la creencia en un dios y son bastante escépticos en cuanto a la posibilidad de que exista uno) o agnósticos (sin la creencia en un dios y dudan en cuanto a su posibilidad). Los Humanistas Seculares tienen orígenes filosóficos y religiosos bastante diversos, desde el fundamentalismo cristiano ante el sistema de creencias liberales y el ateísmo. Algunas personas encontraron bienestar en una posición humanista secular después de haber pasado un período de deísmo. Los deístas son aquellos que expresan un sentimiento vago o místico de que una inteligencia creativa puede estar, o que estuvo en algún momento, conectada al Universo o involucrada en su creación, más ahora no existe, o no se encuentra más ocupada con su operación. Los Humanistas Seculares no dependen de dioses o de otras fuerzas sobrenaturales para resolver sus problemas u ofrecer orientación para sus conductas. En lugar de eso, dependen de la aplicación de la razón, de las lecciones de la historia y la experiencia personal para formar un fundamento moral y ético y crear sentido en la vida. Los Humanistas Seculares ven en la metodología de la ciencia como la fuente más confiable de información para poder saber qué es lo falso o lo verdadero sobre el Universo que todos compartimos, reconociendo que nuevos descubrimientos siempre estarán alterando y expandiendo nuestra comprensión de este y, posiblemente, cambiará nuestro abordaje de los asuntos éticos.

    ¿CUÁL ES EL ORIGEN DEL HUMANISMO SECULAR?

    El Humanismo Secular como sistema filosófico organizado es relativamente nuevo, mas sus fundamentos pueden ser encontrados en las ideas de los filósofos griegos clásicos como los Estoicos e Epicurianos, y también en el Confucionismo chino. Estas posiciones filosóficas buscaban las soluciones de los problemas humanos en los seres humanos en lugar de los dioses. Durante la edad de las tinieblas de la Europa Occidental, las filosofías humanistas fueron suprimidas por el poder político de la Iglesia. Aquellos que se atrevían a expresar opiniones en oposición a los dogmas religiosos dominantes eran desterrados, torturados o ejecutados. Fue tan solo en el Renacimiento de los siglos XIV al XVII, con el desarrollo del arte, la música, la literatura y los grandes viajes de navegación, que se pasó a considerar la alternativa de pasar de una existencia centrada en "Dios" a una alternativa humanista. Durante el iluminismo del siglo XVIII, con el desarrollo de la ciencia, los filósofos finalmente comenzaron a criticar abiertamente la autoridad de la Iglesia y a engranar lo que hoy se conoce con el nombre de "Librepensamiento". El movimiento librepensador del siglo XIX en América del Norte y Europa Occidental, finalmente volvió posible la renuncia de la fe ciega y la superstición, sin el riesgo de la persecución. La influencia de la ciencia y la tecnología, conjuntamente con los desafíos a la ortodoxia religiosa hecha por célebres pensadores como Mark Twain y Robert G. Ingersoll trazaron los elementos de la filosofía humanista, así mismo para las iglesias cristianas que se tornaban más preocupadas con este mundo y menos con el prójimo. En el siglo XX los científicos, los filósofos y los teólogos progresistas comenzaron a organizarse en un esfuerzo por la alternativa humanista a las tradiciones y perspectivas puestas en la fe. Esos primeros organizadores clasificaron el humanismo como una religión no-teísta que atendía la necesidad humana de un sistema ético y filosófico organizado para orientar nuestras vidas, una "espiritualidad" sin lo sobrenatural. En los últimos treinta años aquellos que rechazaban el sobrenaturalismo como opción filosófica viable, adoptaron el término "Humanismo secular" para describir su postura de vida no-religiosa. El Humanismo Secular, es por lo tanto, una filosofía y perspectiva que se centra en los asuntos humanos y emplea los métodos científicos y racionales para lidiar con una gran variedad de asuntos importantes para todos nosotros. Al mismo tiempo que el Humanismo Secular es adverso en muchos puntos a los sistemas religiosos basados en la fe, este se dedica al desarrollo del individuo y de la humanidad en general. Para alcanzar esta meta el Humanismo Secular alienta todo un conjunto de principios que promueven el desarrollo de la tolerancia, la compasión y una comprensión de los métodos de la ciencia, el análisis crítico y la reflexión filosófica. Para una discusión detallada del Humanismo Secular, diríjase a los libros escritos por el fundador del "Council of Secular Humanism", Paul Kurtz, y publicados por Prometeus Books: The Transcendental Temptation, Forbidden Fruit: The Ethics of Humanism, Living Without Religion: Eupraxology, In Defense of Secular Humanismo.